noticiArte: Los científicos archivan imágenes, sonidos y textos en moléculas de ADN

Científicos del Instituto Europeo de Bioinformática (IEB) han demostrado que es posible guardar la información de textos, imágenes y sonidos en moléculas de ADN. El avance abre la vía a utilizar el ADN para guardar grandes cantidades de información durante largos periodos y con un coste de mantenimiento mínimo.El ADN ya es, en la naturaleza, una portentosa base de datos. Contiene toda la información genética necesaria para construir seres vivos, desde la bacteria más pequeña hasta la mayor ballena azul. Y tiene la ventaja de que se conserva durante milenios sin necesitar grandes cuidados, como lo demuestra el hecho de que se ha conseguido extraer ADN de fósiles y reconstruir el genoma de los neandertales.Si es una base de datos tan buena, razonaron los investigadores del IEB, cualquier información debería poder codificarse en ADN. En lugar de codificarla con los códigos de ceros y unos con los que trabajan los ordenadores, bastaría con codificarla con las bases químicas A, C, T y G con los que trabajan las células vivas. “Cualquier información que tengamos en un disco duro podría almacenarse en ADN”, ha declarado Nick Goldman, primer autor de la investigación, en una rueda de prensa telefónica. Para demostrar las posibilidades de la técnica, los investigadores codificaron cinco documentos en ADN: los sonetos completos de Shakespeare en formato txt; el artículo científico en que Watson y Crick describieron la doble hélice de ADN en pdf; el discurso “Tengo un sueño” de Martin Luther King en mp3; una foto de la sede del IEB en Hinxton (Reino Unido) en jpg; y un archivo que explicaba cómo habían codificado la información en ADN.Los investigadores transcribieron estos cinco documentos a código genético –es decir, al lenguaje del ADN escrito con las bases A, C, T y G del ADN-, pero lo hicieron aún con ordenadores, sobre soporte informático. Después enviaron los códigos a la compañía californiana Agilent, especializada en sintetizar ADN. En California, la información pasó de soporte informático a soporte químico cuando los técnicos de Agilent fabricaron moléculas de ADN con los datos de los cinco documentos. Una vez sintetizado el ADN, que cabía en un vial de laboratorio, la compañía lo envió a Europa por correo. Según los resultados presentados online en la revista Nature, cuando los investigadores del IEB leyeron la información del ADN y la pasaron de nuevo al ordenador, pudieron recuperar sin ningún error la información completa de los cinco documentos. Según Goldman, que el ADN pueda guardar la información durante miles de años es una ventaja respecto a las cintas magnéticas que se utilizan hoy día y que deben volver a copiarse cada pocos años. También son ventajas que se conserve bien a temperatura ambiente sin requerir suministro eléctrico y que ocupe tan poco espacio. “Un gramo de ADN contiene más información que un millón de CDs”, ha delcarado Ewan Birney, director de la investigación, en la rueda de prensa. “Mientras se tenga en un lugar fresco, seco y oscuro, no hay ningún problema”.En un momento en que el mundo ya almacena 3.000 millones de billones de bytes de información digital y no hay perspectivas de que la acumulación de datos vaya a frenarse, esta nueva técnica de memoria miniaturizada, fiable, duradera y que no consume electricidad puede resolver un problema tecnológico creciente, afirman los investigadores. Dado que la información del ADN no se puede leer con tanta rapidez como la de otros soportes, sería útil sobre todo para almacenar datos a los que no haya que acceder con urgencia. Según Birney, “el principal inconveniente es el coste de sintetizar el ADN; todos los otros problemas se pueden resolver, pero el precio no es competitivo en estos momentos”. De cara al futuro, dado que el precio de la síntesis y la secuenciación del ADN tiende a bajar, “llegará un momento en que será más barato guardar datos con ADN que con electricidad”, predice Birney.